Me gusta el fútbol. Es por eso que nunca me veréis en un campo de fútbol. Quiza me puedas ver...
(...con su juego malabar, casi circense que te transporta, si les sale su juego, el fútbol se convierte en algo mágico, artístico, y todo lo demás son, estrategias espasmódico-gimnásticas que no tienen que ver ...)
(...)les ofrecen una puesta en escena que nada tiene que envidiar a salsa rosa, que, hace maniacos deportivos, pasivos que llamo de “sillón ball”, muy insanos, que...
(...)a lo que van en realidad es a hablar con los compañeros, hacer pandilla, desfogarse, beber y algunos a montar broncas y lanzar soflamas ultraderechistas,...
(...) y que, nos hacen ser un poco como ovejas que llevan al redil. Creedme el fútbol no es “ asín”.
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