Sobre las costumbres
Me pregunto cómo van a aprender los hijos de los inmigrantes las "costumbres españolas" con dos de las prácticas que el PP aplica o quiere aplicar. La primera práctica es la segregación de los hijos de inmigrantes en los colegios públicos, muchos de ellos convertidos en guetos (dignos, pero guetos); la política educativa que en lugares como la Comunidad de Madrid permite a los padres escapar a los centros concertados -donde la proporción de inmigrantes es mucho menor- no sólo es una inmoralidad, sino que acabará generando una división y una polarización social de peligrosas consecuencias en el futuro. Si no han jugado y aprendido juntos, si no se conocen, ¿cómo se van a respetar? La segunda propuesta suicida es la de oponerse a la asignatura de Educación para la Ciudadanía, a no ser que se la quiten a los hijos de los españoles viejos pero se la mantengan a los hijos de los españoles nuevos. La irresponsabilidad del PP no tiene límites, lamentablemente.
Miguel Martínez López y Carmen Romero Lomas 08/02/2008
Sabias palabras las de Miguel y Carmen, breve, sencillo y conciso. Lo que pasa realmente es que a Rajoy la cuestión de los extranjeros se la refanfinfla, que se suele decir, ya se vio cuando gobernaba el PP y Mariano era, cosa de la que a veces le gusta presumir, Ministro del Interior, algo muy lógico, ya que fue Ministro prácticamente de todo lo que se puede ser Ministro, lo que él pretende es, dado el cariz que ha tomado el asunto, arañar unos votos, diciéndoles a algunos españoles que les falta un pequeño arranque para escorarse a la derecha, que les va a marcar como a becerros, los nuevos ricos españoles, otrora emigrantes, nos hemos vuelto un pelín xenófobos y Mariano apela a esos nuestros bajos instintos.
¿Y qué se le ha ocurrido a Mariano para disfrazar el asunto que huele a discriminación a un kilómetro, en algo que suene a propuesta seria? El contrato de integración y el visado por puntos, como el carnet de conducir. En realidad pura palabrería (recomiendo leer sólo los titulares), pues todos sabemos de qué va la cosa.
No creo que nadie tenga que firmar ningun contrato que no sea un contrato de trabajo, pues todo lo demás viene en las leyes, si las personas que vienen a España cumplen las leyes, con eso me parece que ya están haciendo lo que hay que hacer, al que no las cumpla, eso sí, aplicarle todo el rigor que en justicia se merezca.
Mientras la denuncia de Carmen y Miguel de que los hijos de inmigrantes están siendo expulsados de los colegios concertados, mayormente dirigidos por instituciones católicas, el Papa Benedictine está en cosas mucho más importantes. Y, los anuncios por palabras de los periódicos de lo más grotesco y gracioso, si esas son las costumbres españolas que dice Rajoy, apañados vamos si las aprenden los extranjeros y las practican.
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