La juventud de ahora viene pegando fuerte, además de montarse estas fiestas, montan unos grupos de música de lo más chachi. Pinchando aquí , se puede escuchar al grupo musical Baby Queen, cantando la canción, We're the champions, con una letra, en versión desternillante. Es un enlace de milinkito.com. Así quedaron despues de cantar unas canciones y de unas birras, no se preocupen en casa estaban avisados.
Al hilo de la broma de la tierna juventud, hablemos de la menos tierna juventud.
Hablando de una manera más seria sobre menores, me gustaría referirme a otros menores, éstos ya, un poco más mayores; a los que es de aplicación la llamada Ley del Menor, de 14 a 18 años, y en algunos casos hasta los de 21 años.(art.69 L.O.10/1995 de 23 de noviembre).
Hemos pasado en poco tiempo de tratar a los jóvenes a palo limpio como si fuesen presos que han dejado en custodia, a, una permisividad que nos tiene inmersos en una paidocracia que, ni es beneficiosa para ellos -los menores- a largo plazo, ni es beneficiosa para la sociedad, ni para nadie. Muchos chavales que bajan de los 14 no se les puede parar, y llegan a cometer delitos graves, por ahí la ley tiene muchas carencias.Cada día hay más menores que pegan a sus padres, más maestros acosados por ellos, aumenta la violencia y el chuleo con los compañeros ( ahí está el caso extremo de Jokin, que se suicidó, al no poder aguantar) a estos menores de más de 14, poco o nada van a pagar . Los delincuentes, vamos a decir, normales están sujetos a un Código Penal, que nos puede llegar a todos, pero los delincuentes, llamemos, especiales (los terroristas) tienen, y a nadie por lo que se ve, le parece mal, una legislación especial, dada la naturaleza de sus delitos. Así debiéramos obrar en la legislación de los menores, hay menores que cometen las clasicas trastadas que, no nos engañemos molestan, pero con unos castigos disuasorios acordes con su edad, en sitios convenientes, y con profesionales competentes se les puede reconducir y recuperar en más o menos tiempo, según los casos. Pero lamentablemente hay otro tipo de menores, que por múltiples razones y sin deberse a una causa concreta achacable a nadie unas veces y con causas visibles otras, cometen unos delitos muy graves( asesinatos, robos con fuerza, violaciones, practicas mafiosas etc...), pues, aplicando los paños calientes de la Ley del Menor, lo que sucede es, que al ver que no pasa nada, la escalada violenta se ve alentada, y llegan a reírse hasta del Juez de Menores, siendo prácticamente imposible, dada la altura a la que han llegado los acontecimientos, reinsertarles, lo que hacen es seguir delinquiendo hasta llegar a la edad de ir a la cárcel, ya con delitos escandalosos. Se deben pactar unos castigos acordes con la edad, naturaleza del delito y reincidencia, se debe seguir el grado de reinserción social, día a día y caso por caso, se debe arbitrar una manera de que la víctima se pueda personar en la causa, no como ahora que hay que acogerse a lo que el fiscal de turno tenga a bien pedir o pactar. La recogida de firmas que hará la madre de Sandra Palo(asesinada vilmente por tres menores y un mayor de edad, presuntamente) es la oportunidad, para que prospere una iniciativa legislativa, oyendo a todos los implicados en la problemática. Nos jugamos nuestra juventud y nuestro futuro.
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