La dirección del Partido Popular ha salido políticamente del armario uniéndose a la cúpula de la Iglesia católica, que había hecho con anterioridad lo propio.
La ficción respondía al nombre de Foro Español de la Familia. Ahora ya se sabe, pues, con certeza, qué manos en realidad son las que mecen la cuna de la protesta contra Zapatero vía matrimonios homosexuales: la mano derecha y la mano del neonacionalcatolicismo. Los obispos y los conservadores- con excepciones- vuelven a ser pareja de hecho. Como antaño.
Pero a Rajoy – cual perro flaco al que todo son pulgas – le ha salido la criada respondona. El PP montó en uno de sus conatos de viaje al centro la Plataforma Popular Gay, un tributo a la modernidad. A pesar de que el líder de la plataforma, Carlos Biendicho, ya había enseñado sus dientes, ayer lo hizo de nuevo incluyendo amenazas. Bindicho ha anunciado que, o Rajoy apoya la ley de matrimonios homosexuales, o él revelará la orientación sexual de ciertos políticos.
La manifestación del sábado puede ser un bumerán para el PP. No se puede exhibir una plataforma gay y, en paralelo, obstaculizar la boda entre homosexuales.
Por cierto, siendo civil este matrimonio, ¿ cómo justifica la jerarquía católica su oposición frontal a una ley que no obliga a nadie, que no le incumbe y que para nada impide la existencia de la familia en su versión clásica? ¿ Habrá algún obispo que recuerde como mínimo aquel pasaje evangélico cuando Cristo exhorta a dar al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”.
Enric Sopena en el Periódico
El Grup Cristià homosexual y la Plataforma Popular Gay toman además otras medidas, en su punto de mira, los obispos y como siempre, monseñor Rouco Varela.
No hay comentarios:
Publicar un comentario