Sobre el estudio que aparecio hace unos días sobre que, testiculos mas grandes en los murcielagos significan un cerebro más pequeño, versa la columna de Antonio Martinez de todos los domingos en el país:
Huevos de murciélago
¿HABRÁ ALGO MÁS TRISTE que dedicar una vida a medir el tamaño de los testículos de murciélago? En fin, triste, triste...: tampoco hagamos un juicio moral. Limitémonos a constatar el hecho. Periodismo sin interpretación: Científicos de la Universidad de Siracusa, en Estados Unidos, han estudiado el tamaño de los testículos de 334 especies de murciélago, y han llegado a la conclusión de que, cuanto más grandes son los testículos, menor es el cerebro. A más huevos, menos pesquis. Muchos ya lo sabíamos. Por intuición científica. Desde pequeñitos, muchos nos miramos y decimos: esto tiene que estar en algún lado. En el cerebro, hombre, en el cerebro. ¿Dónde iba a estar toda esa masa ausente? En el cerebro. Pero había que confirmarlo científicamente, y ahí está: confirmado científicamente: PA / PAR = IH. Paquetón de abajo dividido entre paquetón de arriba igual a inteligencia humana. Desde que se conoce este estudio, las discotecas se han llenado de chicos que se acercan a ligar diciendo: "Mí, tonto, mí cerebro nada, cero patatero". Y también hay quien se acerca a los hombres preguntando: "¿Logaritmo neperiano de 750?". Y si contestas correctamente, te descartan.
Pobre murciélago. Ya es mala suerte nacer murciélago, animal no especialmente querido, para que encima te vayan tocando las pelotas unos científicos de Siracusa. Muy mal. Pobre murciélago. Habrán detectado que en toda la información no se habla de las murciélagas, ni se tiene en cuenta su punto de vista. Sólo se dice que los murciélagos tienen que desarrollar genitales y reducir cerebro porque a las hembras les gusta más. Van obligados. Se da por hecho el matriarcado. El murcielagado, en este caso. Claramente se ha hecho este estudio basándose en la opinión del murciélago macho: a la murciélaga, seguro que ni se la ha estudiado. Esto va así en todas las especies, se ve. Y concluiremos: ¿no sirve para nada el estudio, es una chorrada? Bueno, depende. En cierto sentido, el estudio sí quizá pueda ayudarnos a intuir el porqué de ese misterioso atractivo que siempre se ha atribuido a George W. Bush. Realmente, debe andar muy sobrado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario