martes, agosto 09, 2005

Palabras como etiquetas

Los metrosexuales ya no están de moda, ahora se lleva
DE MODA. Un modelo de John Galliano,
icono de los tecnosexuales. / EFE
ser tecnosexual o heteroflexible

De repente, se extendió la cultura metrosexual: varones urbanos preocupados por su aspecto, dedicados al cuidado de su cuerpo, con abundantes conocimientos estéticos y seguidores de la moda. La palabra causó furor. Pero, claro, cuando se popularizó y lo mismo servía para llamar a David Beckham que para tomarle el pelo a Fiti, el de 'Los Serrano', el adjetivo cayó en picado. Como a ciertas prendas, a estos adjetivos sólo les vale la percha de la exclusividad.

Los paladeadores de lo excepcional, los seguidores de lo exquisito esquivan las palabras cuando llegan a la mayoría. Si están en boca de todos ya no sirven. Pero no hay problema. Los adjetivos salen del cajón sin cesar. En especial entre los anglosajones, que inventan a cada rato nuevos patrones, palabras brillantes para nombrar fenómenos emergentes e inclasificables.

Espía de las palabras

Ahí van unas cuantas definiciones tomadas de wordspy.com (el espía de las palabras).
Retrosexual es el varón de estética subdesarrollada que dedica el menor tiempo y dinero posible a cuidar de su apariencia.

Los tecnosexuales son tipos que unen las cualidades del metrosexual con su amor por las nuevas tecnologías. Una de las más llamativas es heteroflexible. El concepto sirve para designar a alguien de evidentes tendencias heterosexuales pero abierto, si se tercia, a mantener relaciones con personas del mismo sexo.

Otra palabra hermosa es adultescente que designaría al pureta que, pese a su edad, sigue enganchado a la estética juvenil, lo que en castellano se dice un 'colgao'.

Hermosa, pero más compleja es "hasbian" (de lesbiana y 'has been', ha sido). Con este juego de palabras las lesbianas norteamericanas designan a antiguas colegas que se han cambiado de acera. "Celesbian" se usa para las lesbianas que han llegado a ser célebres. También hay una corriente de opinión conocida como supremacía hetero: sus seguidores creen que los heterosexuales son superiores y que los gays no merecen un trato de igualdad ante la ley, según la definición que se lee en words spy.

Un filón

La página es un filón. Cita el divorcio Viagra, provocado por las consecuencias que la ingesta de este medicamento causa en la convivencia matrimonial; la celebrofilia, intenso y anormal deseo de mantener una relación romántica con una celebridad, y al pomosexual, la persona que rechaza las etiquetas como homosexual o heterosexual para definir las tendencias sexuales. Este último, por lo visto, debe ser como un dinosaurio en este mundo de etiquetas.
JULIÁN MÉNDEZ/BILBAO

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