Voraces empresarios

El salario medio español prolonga su caída y alcanza niveles no vistos desde 1997 y por lo que se ve va a seguir cayendo en septiembre y en diciembre. Por otra parte vamos a alcanzar una tasa de ocupados histórica de 19.266.000 personas al final de año con lo que se prevé una cifra de parados cercana al 9,3 %, el nivel más bajo de los último 26 años. Como dato negativo la tasa de temporalidad que es del 33,3 % la más elevada desde 1995 y se augura que seguirá creciendo.

Todo lo cual se puede considerar como positivo, nos dice sin embargo que sobre los trabajadores recae el peso de la competitividad de la economía española, ya que frente a estos sacrificios de salarios y temporalidad, tenemos que los costes laborales de los empresarios son un 32% inferiores a los de la media de la UE, los cuales están en unos 38.000 € anuales, siendo los españoles cercanos a los 24.000 € anuales.

Además , los empresarios españoles han disparado sus beneficios al triple de los costes laborales, siendo los que menos invierten estos beneficios en bienes de equipo para modernizar las empresas. (3ºpárrafo)

No cabe duda que un empresario lo es para ganar dinero, pero a la luz de estos datos cabría pedir a los empresario españoles menos voracidad acumulando beneficios y un ejercicio de mayor responsabilidad, ya que no ofrecen salarios decentes podrían al menos ofrecer más seguridad en el empleo para que el trabajador viva con menos ansiedad ante el futuro incierto que sufre con semejantes tasas de temporalidad, que no nos podemos engañar redundan también en una menor calidad en el trabajo que se hace y en un nivel más bajo de productividad; elementos ambos que no son buenos para la economía española en general aunque sí para algunos empresarios en particular.

Y ya que el empresario español por sí mismo no es capaz de ser más humano, solidario y responsable, correspondería al Gobierno y a las autonomías primar a los empleadores que ofrezcan más seguridad en el empleo y a los que inviertan parte de los beneficios en modernizar sus empresas para un futuro más viable de las mismas.